Corresponde a una auditoría independiente, que más allá de verificar la razonabilidad de estados financieros, permite llevar a cabo un análisis con un enfoque estratégico para el desarrollo de la operación del cliente, teniendo como base para ello la metodología establecida en las Normas de Auditoria Internacional (NIA). Dentro de sus principales alcances se encuentra:
- Diagnostico financiero.
- Evaluación y diagnostico del ambiente de control.
- Evaluación de riesgos y controles asociados a procesos.
- Evaluación de riesgos estratégicos y de cumplimiento regulatorio.
- Análisis de la gestión de los recursos.
- Comunicación de resultados para la mejora continua.